No se puede esperar más de Ti

Jesús acoge a todos los que padecen y sufren. No se puede esperar más de Dios. En los momentos de dificultad podemos estar junto al Señor.

Jesús lleva esperanza allí donde no la hay, o donde se nos tambalea. Con Él se transforma la realidad porque sostiene cada paso.

Jesús se compadece de los que le siguen y no tienen qué comer, pero también se compadece de ti, de tus hambres, de tus anhelos. Dios padece contigo, ponte junto a Él y descubre cómo el amor transforma la vida.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Adviento, tiempo de humildad

Como en tiempo de José